Si estás por cambiar tu cerradura por una más segura o que funcione mejor y todavía no sabés qué cerradura poner, te damos la solución.

Identificar el tipo de cerradura que tenemos

Lo primero que vamos a hacer, si se trata de un cambio de cerradura, es ver cuál tenemos. Los tipos más comunes son:

Cerrojo: suele ser una segunda cerradura aparte de la principal que está junto al picaporte. Habitualmente se agrega para reforzar la seguridad.

Manija: es la cerradura que va en el típico picaporte de manija.  Pero ojo, la bocallave se encuentra en la manija misma, no la confundamos con la cerradura de embutir, que es más común en nuestro país.

Perilla: en Argentina es menos habitual. Para que nos demos una idea: es aquella con forma de bocha. Se usa tanto para las puertas internas, como para las entradas principales de las casas.

Sobreponer: el uso más común es en puertas de patios y portones, es decir para aberturas de herrería.

Qué cerradura poner. Foto de una mano colocando una tarjeta dentro de una cerradura electrónica.

Cerradura electrónica, común en los hoteles.

Eléctrica: técnicamente sería un subtipo de cerradura de sobreponer. Es común en el ingreso de edificios, tanto de departamentos pero principalmente de oficinas y habitaciones de hotel.

Otros modelos

Cerraduras para puertas de aluminio: como el nombre ya lo indica, están específicamente diseñadas para este tipo de abertura.

Cerradura de embutir: es algo más sofisticada que las descriptas más arriba, pero a la vez de las más frecuentes en Argentina. También es de las más seguras.

Manillón: está compuesta por una manija grande, fija y junto a ella un cerrojo. Suele colocarse en las entradas principales.

Decidir qué cambio queremos hacer

Acá la disyuntiva es sencilla: si lo que queremos es reemplazar la cerradura que teníamos por otro modelo diferente, es probable que necesitemos de un cerrajero profesional. Esto se debe a que cambiar el modelo de cerradura implica hacer modificaciones en la puerta.

En cambio, si lo que buscamos es colocar una cerradura del mismo tipo que la de antes, la tarea será más sencilla. Podremos comprar una nueva e instalarla siguiendo la manera en que estaba colocada la anterior.

Qué cerradura poner: marcas

Lo que dijimos respecto al cambio de modelo de cerradura, es válido para las marcas. Si la puerta ya tuvo una cerradura, deberemos saber no sólo el modelo sino también la marca, para ir a comprar una que encaje en los mismos espacios. Salvo, desde luego, que tengamos una puerta nueva o que no nos importe modificar la puerta.

Verificar el lado de la puerta

Otro condicionante de la cerradura a poner será si la puerta es derecha o izquierda. Existen cerraduras reversibles que pueden ir en cualquiera de ellas. Pero el resto van o para puertas derechas o para puertas izquierdas solamente.

¿Cómo saber de qué tipo es nuestra puerta? Nos paramos del lado de afuera de la puerta y la miramos. El lado del cual se encuentren las bisagras, determinará si la puerta es derecha o izquierda.

También es importante saber hacia dónde se abre la puerta. Para saberlo, haremos lo mismo que antes: nos pararemos frente a la puerta, desde el lado de afuera. Si la puerta abre empujándola hacia adentro, tiene abatimiento interior. Si abre tirando de ella hacia afuera, tiene abatimiento exterior.

Esto es importante por el pestillo o resbalón, que es la pieza que asoma desde la cerradura por el costado de la puerta y encastra en el marco. La misma que cuando accionamos el picaporte, se esconde en la cerradura y libera la puerta.

Las cerraduras, por defecto están diseñadas con abatimiento interior.

Si no llegásemos a conseguir una cerradura con el abatimiento de nuestra puerta, podemos recurrir a un cerrajero profesional que invierta el pestillo.

Qué cerradura poner: características de la puerta

Por último, deberemos tener claro si nuestra puerta es de madera sólida o hueca. Si se trata de una puerta de hierro o reja. También puede ser de aluminio. Abatible o corrediza. Y tomar sus medidas, especialmente el ancho.

Son datos importantes para el momento de comprar la nueva cerradura, especialmente si deseamos cambiar de marca o modelo.

Así, nos aseguraremos de elegir bien la cerradura a poner.